Hace pocas semanas se presentó al público la Serie para la Televisión Kidding (bromeando), cuyo protagonista principal es el actor veterano Jim Carrey. Definir en un post lo que he contemplado durante los 4 primeros capítulos que he visto, me resulta complicado, porque por momentos me sonaba algo infantil y ñoño, por otras surrealista, en otras ocasiones dramática y costumbrista y al fin cómico, pero sin analizar todas las corrientes filosóficas y artísticas que me asaltaban, me sonaba como si a la “máscara”, el personaje de Jim Carrey que le hizo famoso en el mundo, le hubiesen quitado sus poderes y se hubiese encarnado en la figura de Jeff Pickles, un hombre “showman”, que dedica su vida a hacer reír a los niños y que tiene también una vida rutinaria tras las cámaras.
Me ha parecido que los creadores de la Serie, con Dave Holstein como «padre de la idea», se han guiado mucho en el propio Jim Carrey para Kidding, porque ningún otro actor en el mundo podría hacerlo mejor. Es un papel creado ex profeso para él. Los diálogos son rápidos y agudos, con una inteligencia ajena al ámbito donde se desarrolla, pues sólo se podría dar entre intelectuales muy preparados. Por ejemplo, que una niña de ocho años conozca los complejos indicados para “coaccionar” a su madre y que no se divorcie, me parece no imposible, pero poco probable. Los diálogos y escenas están dirigidas por Michel Gondry, la «pareja» artística de Carrey y que parecen reconciliados tras años ignorándose, así que entre los productores ejecutivos encontramos a los tres: creador-director-protagonista, entonces no nos debe resultar nada extraño que cada escena haya sido adaptada en colaboración muy estrecha entre estos tres artistas, Holstein-Gondry-Carrey.
El primer capítulo se estrenó simultáneamente el pasado 9 de septiembre y se han emitido ya 5 en nuestro país por medio de Movistars Series. El argumento puede parecer dirigido a la familia, pero existen demasiados detalles sexuales que podrían suscitar las preguntas de los más pequeños, preguntas bastante embarazosas, así que lo calificaría como “no tolerada a menores”. En principio, la Temporada constará de 10 capítulos y no he leído por ningún lado que se prepare una segunda. Para los votantes del índice IMDB, la serie merece una puntuación de 7.3 entre casi 3K, una nota que habla de una buena acogida entre el público.
En el primer capítulo aparecieron numerosos actores conocidos como invitados, como Betty Thomas, Conan O´Brien o Dann Trejo, pero la Serie se conduce por los personajes principales encarnados por Jim Carrey, Frank Langella, Judy Greer, el niño actor Cole Allen,la niña actriz Juliet Morris y Catherine Keener. Aunque la atmósfera no lo parezca, tanto los diálogos como las situaciones tienen cierto aire a las producciones de Tim Burton por su colorido y escenografía. Creo que es una producción muy atrevida y “necesaria” para salirse un poco de los mismos temas que tantas series explotan sin ofrecer ninguna novedad. Es muy entretenida y sorprendente en muchos aspectos y a los nostálgicos del surrealismo seguro que les encantará, pues es muy ingeniosa por esa parte.