A mediados del año pasado se estrenaba en Estados Unidos la Serie Iron Fist, uno de los pocos personajes de Marvel que no se habían convertido en “estrellas” en los medios y que “vuelve” a despertar esa admiración juvenil sobre las artes marciales que todos tenemos dentro. Artes marciales y Nueva York, resulta sinónimo de acción y aventuras, salpicado por numerosos aspectos culturales chinos y tibetanos. Por eso mismo resulta de un tema bastante conocido para los amantes del Comic y del Cine de Aventuras, factor que sugiere a la Crítica una mayor atención y un rigor que puede pasar factura.
Cuando una productora lanza una segunda temporada ya supone que la primera ha tenido una gran acogida, pero me temo que en este caso ya estaban acordados nuevos capítulos, de modo que a los 13 primeros que ya podemos ver en Netflix, se suman otros 10 que se estrenaron en Estados Unidos el pasado 7 de septiembre del 2018 en EE.UU. y que pronto le seguirán en España, si Netflix lo considera oportuno.
Los actores principales de la Serie son bastante conocidos. Me están pareciendo muy convincentes y suplen bastante bien las carencias del guión, que son numerosas, unas veces por demasiado “infantiles”, otras por excesivamente dramáticas y que por inesperadas, resultan bastante difíciles de transmitir al público las emociones esperadas. En los diez primeros capítulos que he visto, me ha parecido que los creadores de la Serie han intentado plasmar al personaje del Comic, cuyo primer ejemplar se publicó en 1974, dos años después de Power Man. Iron Fist o Puño de Hierro desde entonces inspiró series y videojuegos, pero muy pocas veces en solitario, casi siempre como miembro de Héroes de Alquiler, Los Defensores y actualmente como otro más del equipo de Los S.H.I.E.L.D.
No sé qué pasa con este personaje para que los guionistas lo traten tan mal. Si miramos el índice IMDB, los espectadores han puntuado la Serie con un 6.7 sobre casi 90K votos. Es una puntuación alta, pero no suficiente si la comparamos con otras series míticas de personajes Marvel. En mi opinión se debe a que los guionistas le han insuflado una enorme dosis de inseguridad. Me parece estupendo que dude ante situaciones delicadas, le confiere un alto grado de humanidad, pero en la Serie lo veremos dudar una y otra vez en cada situación, como si su edad mental se hubiese quedado en los 12 años, y eso al público adulto no nos convence. En cambio la tasa tan elevada de votantes se debe al público juvenil e infantil, pues les ha encantado verse completamente identificados con el personaje. De haberse cuidado este detalle, Iron Fist no se vería como un híbrido de héroe y anti-héroe, para pasar sencillamente a ser un Héroe, que a mí me habría encantado.
La estrella del momento Finn Jones encarna a Puño de Hierro, a Danny Rand para el resto de los mortales en la Serie, un heredero multimillonario que desapareció en un accidente aéreo quince años atrás. Jessica Henwick es la amiga y compañera del héroe Colleen Wing. Jessica Stroup y Tom Pelphrey son los dos hermanos que comparten infancia e imperio económico con Danny Rand, los hermanos Meachum. Me está gustando mucho sus interpretaciones. Pero la que más me ha gustado es la del padre de los Meachum, Harold, que lo interpreta David Wenham. Si tuviese “mano” en los Globo de Oro, le daba uno al mejor secundario o de reparto. A finales de la primera temporada se incorpora el actor Sacha Dhawan y en la segunda temporada aparecerá la guapa Alice Eve.
La producción corre a cuenta de Marvel Studios y ABC Studios, con numerosos rodajes exteriores en la misma Nueva York. La dirección creativa está a cargo de Scott Buck, que lleva ya tiempo colaborando con Marvel. Es en esta faceta donde me muestro más crítico porque los guiones son mejorables y ponen en algunos aprietos a los actores. Una cosa es que existan “cambios inesperados” para darle emoción a las situaciones que se suceden, y otra muy distinta que dichas situaciones se resuelvan de una manera “estúpida” y sin ninguna lógica. No quiero entrar en detalles por si todavía no habéis visto los capítulos. En general es muy entretenida. Muchos capítulos con combates y algunos muy cruentos, es otra característica que me ha llamado la atención: por momentos parece una serie infantil, como de pronto se torna violenta, sangrienta y “no tolerada para menores”.